Canta, canta, dime que me odias,
escúpeme y has alarde de lo que he hecho,
pero no te calles, no pierdas eso tan especial en tí.
Grítame, córtame y malgasta tu tiempo
pensando que me desprecias, que jamás volverás.
Basuréame, no quiero vivir lejos de ti.
Hazme otra vez esos dibujos extraños,
veo tus recuerdos y me desvanezco de nuevo
tan sólo quiero retroceder el tiempo
y no cometer tantos errores.
¡Cuántas veces me fallaste!
nunca te reproché que me abandonaras
y cuando por primera vez desaparezco,
acudes a la indiferencia, tu mejor castigo.
Ahora no puedo amarte,
lo que sentí se convirtió en odio
en ganas de ser indiferente tambien yo
y arrancarte los ojos, esos que jamás me miraron.